El Arquillo del Ayuntamiento de Sevilla, es un lugar muy conocido por los sevillanos, principalmente, porque allí se ubica uno de los belenes más famosos que se instalan por todo el Casco Antiguo, durante las fiestas navideñas.
Pero ese famoso arquillo forma parte de la historia antigua de Sevilla ya que el lugar donde hoy día está situada la Plaza Nueva y la Casa Consistorial era el espacio que ocupaba el antiguo Convento de San Francisco, que desde el siglo XIV fue uno de los grandes recintos eclesiásticos de la ciudad, que contaba con un gran seminario, biblioteca, salas estudio sacro, hornos e incluso, cuadras para la cría de caballos.
Lo que hoy conocemos como el Arquillo del ayuntamiento, era una de las entradas principales al Convento de San Francisco y precisamente por eso hoy día la Plaza trasera del Ayuntamiento lleva el nombre de San Francisco.
En 1840 el antiguo Convento de San Francisco se destruyó por el mal estado de la construcción y la desamortización de Mendizábal, dejando el solar que hoy ocupa la Plaza Nueva y se pudo finalizar la Casa Consistorial tal y como hoy día la conocemos. Por eso la leyenda de este sitio es que es el único vestigio que queda del gran convento que fue el de San Francisco.
No hay comentarios:
Publicar un comentario